21 octubre 2006
CON LOS OJOS DEL CORAZÓN
Sábado 21, 18:48. En Cuatro ponen Con los Ojos del Corazón (Music from Another Room. Charlie Peters, 1998). Curiosamente, a la misma hora emiten en Telemadrid Tres Hombres y una Pequeña Dama (3 Men and a Little Lady. Emile Ardolino, 1990) de la que Peters escribió el guión.
En la escena, Jude Law (Danny) habla con sus caseros y jefes, el anciano matrimonio de reposteros compuesto por Jan Rubes (Louis Klammer) y Judith Malina (Clara Klammer)
CLARA: El amor puede aparecer en cualquier momento.
LOUIS: Como el apendicitis.
15 octubre 2006
SYMMETRY
El original de Mew.
10 octubre 2006
IN MEMORIAM
O no escribo nunca o tres veces. Aunque me hubiera gustado no tener que hacerlo ahora. Acabo de enterarme de que ha fallecido Concha García Valero. Quizá no os diga nada, pero era la voz de Monica en Friends o Catherine en CSI. Una gran profesional y mi actriz de doblaje favorita. Lo único que tenía claro de mi nueva película es que quería que ella doblara a Elizabeth en la versión española y catalana.
Curiosamente, y eso no la sabe mucha gente, empezó como actriz en películas eróticas hasta que arrancó en el mundo del doblaje con la serie Canción Triste de Hill Street. A partir de ahí ha sido una de las voces más activas de los noventa y este poco de siglo 21 que ha podido vivir. Fue la voz habitual de Joan Cusack, Kristin Scott Thomas, Courteney Cox, Madeleine Stowe y en miles de anuncios televisivos.
Por ahí están diciendo la famosa frase de "después de una larga enfermedad", el eufemismo para el cáncer. Yo lo descubrí hace un par de años (quizá menos) en Telemadrid, de la manera más surrealista. En el programa Madrid Directo (que se merece una tesis doctoral) conectaron con una peluquería especializada en pelucas para pacientes con cáncer. La dicharachera reportera (creo recordar quién era, pero no quiero meter la pata) dijo que al centro iba todo tipo de gente y que "quizá este rostro no les diga nada, pero si oyen esto ¿qué me dicen?" Y la pobre Concha, que estaba muy desmejorada y con un pañuelo en la cabeza ocultando su falta de cabello, moduló su voz como Monica Geller e improvisó una típica frase en las que el personaje reprendía el desorden de Rachel.
Pensé que había superado aquello al seguir viéndola en activo.
Una pena. Qué putada.
TLEINTA, NI PA TI NI PA MÍ
Siempre me ha sorprendido encontrarme en el DIA con los comerciantes chinos de mi barrio. Llenan el carrito del supermercado con botellas de refreso de dos litros, latas de bebida y decenas de kilos de azúcar, pasan sus cupones descuento y pagan al contado sin pedir factura ni nada. Yo pensaba que esta gente iba a los cash & carry de las afueras, o a los proveedores oficiales, pero no les debe de salir mal el negocio si luego tampoco lo revenden carísimo en sus tiendas.
Hoy. Martes. 14:32. Entro en un establecimiento de alimentación regentado por ciudadanos asiáticos (aseguraría que chinos, pero vete a saber). Al fondo del local (justo donde tengo que ir yo) se encuentra una mujer, su marido y su hijo. Aseguraría que son rumanos (pero vete a saber). Ella está en cuclillas, en el suelo tiene abierta una mochila de la que va sacando varios blíster de paquetes de chicles, pilas alcalinas, embutido envasado, paté... y se los va dando a un joven de la tienda que le va diciendo cuánto le da por cada cosa. El marido da el visto bueno con la mirada a la transacción mientras la madre le da un guantazo al niño por estar incordiando. Recuerdo: dos y media de la tarde, tienda llena.
Como no creo que la situación sea que esa familia ha tenido un traspiés económico, ha vaciado la nevera en la mochila y, tras coger unos paquetes de chicles y pilas que tenían en un cajón, se lo han llevado a los tenderos de ojos rasgados para, con gran dolor, vendérselo, como no creo que sea eso, he de pensar que le estaba vendiendo mercancía robada.
Lo hiriente del asunto es que yo había entrado a la tienda con una bolsa de otro sitio, iba cogiendo productos de las estanterías y los llevaba en la mano. Al verme, el joven encargado dejó la compraventa con la mujer y se dedicó a estar a mi lado, mirando fijamente mis movimientos con la bolsa, hasta que me acerqué a la caja para pagar. Entonces vi cómo volvía a regatearle a la mujer de la mortadela robada.
No hay bazar chino que no tenga cámara de vigilancia y es muy normal que en las grandes tiendas haya jóvenes sólo dedicados a andar por los pasillos viendo que nadie se lleva nada. Piensa el ladrón que todos son de su condición...
Yo estaba acostumbrado a que en cuanto pongo el pie en El Corte Inglés, la Fnac o Zara, me estén mirando o incluso me sigan, pero que un chino que está comprando chicles robados me vigile por si me meto en la bolsa de la perfumería un paquete de queso para gratinar, me parece el colmo de la humillación.
"Saigón... Mierda." Capitán Benjamin L. Willard (Martin Sheen) en Apocalypse Now (Francis Ford Coppola, 1979)
PONLOS EN FILA, QUE SON BILLETES
A los otros jóvenes entrepreneurs de la "ciber nada", Google, no se les escapa una empresa puntera (caso de este Blogger, por ejemplo) y acaban de adquirir YouTube por 1.650 millones de dólares americanos. Ja, ja, ja... Y yo jugando a las peliculitas...