14 julio 2006

DONDE LAS HORMIGAS VERANEAN DESNUDAS (13 años después)


Abandono este decrépito pueblo venido a más para dedicarme unos días al asueto más descarado. Muchos pensarán que eso ya es lo que hago aquí, pero hay que ser muy tonto (mutónto) para pensar que mola estar en una ciudad repleta de obras, turistas atolondradas, 30 grados bajo mi tejado a las cuatro de la madrugada y, además, donde ya no me queda casi nadie a estas alturas.

Así que me marcho a 38º 47' 40 latitud norte y 0º 9'90 longitud este. Allí espero no sudar seis litros diarios, tener que echarme una sabanita para dormir por la noche y llevar una vida sana lejos de los excesos capitalinos.

Una vez recuperado y, ojalá, más animado, supongo que retomaré con más interés estas páginas. El coma de calor y polvo sahariano en el que he estado esta semana, me ha impedido plantearme cualquier actividad intelectual más complicada que recordar el camino hasta la cocina para poder beber agua. ¿Ha quedado claro que llevo mal lo del calor?

En fin, amigos y amigas (y enemigos, que también los habrá por aquí), sed felices donde estéis. Disfrutad y confiad.

Shalom.

BONUS TRACK 14/7/06

Os dejo con mi apuesta particular para canción del verano. Es del año pasado, pero desde entonces se ha convertido en un himno privado. Higinio Orduña, aquí como SAM O, nos deleita con su temazo UN APLAUSO. Que os guste. O no.