07 agosto 2006

MATHILDA Y EL GOLPE DE CALOR


Siempre me preguntan cómo está y qué hace Mathilda cuando nos reencontramos después de una de mis ausencias. Aquí tenéis la respuesta. Por favor, encended vuestro altavoces y subid el volumen. Podréis oír cómo dice "Agua. Agua, agua..." O eso es lo que yo oigo. En cualquier caso, es tronchante.

Ah, como es obvio, he vuelto de mis tres semanas (algo más) en aquellas coordenadas que todos sabéis y que alguien quizá haya buscado. Prometo volver a la rutina y escribir más aunque no sé para quién. Si no me lee nadie, menos en verano. Espero que Blogger aguante y esto lo puedan ver mis hijos. Pero como no tengo pensado tenerlos, pues por lo menos que lo lean las gemelitas Thyssen.